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Solventes, segunda sustancia de inicio en el consumo de drogas: Secretaría de Salud

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En el número telefónico de la Línea de la Vida 800 911 2000 se brindan servicios de información, asesoría y acompañamiento las 24 horas del día; sobre todo, en una situación de urgencia.

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Los solventes son la segunda sustancia psicoactiva de inicio en el consumo de drogas, y se estima que 84 por ciento de las personas consumidoras empieza su uso antes de los 19 años; informó el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell-Ramírez.

Durante El Pulso de la Salud, en la conferencia de prensa matutina que encabezó el presidente Andrés Manuel López Obrador, ante el titular del ramo, Jorge Alcocer Varela; López-Gatell explicó que una de las herramientas de la prevención es el acceso a espacios de identidad, aceptación e inclusión para las y los jóvenes.

“No solamente oportunidades materiales, de empleo o de educación”, expresó.

Precisó que en el número telefónico de la Línea de la Vida 800 911 2000 se brindan servicios de información, asesoría y acompañamiento las 24 horas del día; sobre todo, en una situación de urgencia.

Los inhalables son sustancias químicas tóxicas que se vaporizan; al respirarlos pasan a la sangre, dañan la función cerebral y causan efectos adictivos y de perturbación del aparato sensorial.

En la sección “Adicciones y salud colectiva“, explicó que este tipo de sustancias llevan a la destrucción de la funcionalidad psicológica, afectiva, social y cerebral; con dificultades de oxigenación, coordinación, planeación y movimiento. También afecta otros órganos del cuerpo y causa daños irreversibles.

López-Gatell Ramírez explicó que el uso de los solventes es más común entre la población de escasos recursos debido a que son de fácil acceso. Existen tres tipos: los disolventes, que se pueden encontrar en thinner, tolueno, pegamentos, acetona y marcadores permanentes; los gases en gas de la risa, cloroformo, anestésicos y gasolina; y los aerosoles en spray para cabello, pintura y cera para muebles.

Señaló que las personas usuarias de estos productos son excluidas por fenómenos sociales y económicos, que engañosamente los lleva a formar parte de una comunidad para cubrir esa necesidad de pertenencia, inclusión, confianza y lazos comunitarios.